Una de las prácticas más recurrentes en los últimos años en las zonas aledañas al bosque Cachil es la "reforestación" a través de especies ajenas al hábitat local, tales como el eucalipto y el pino.
Desde las políticas de gobierno se alienta esta práctica sin tener en cuenta que si bien este tipo de plantaciones se desarrollan de manera formidable, lo cierto es que al mismo tiempo son especies que destruyen el medio debido a la gran cantidad de agua que consumen y a un proceso químico que deteriora el suelo y lo empobrece.
Se calcula que sólo en los dos últimos años se han plantado en la zona más de 100 000 eucaliptos y pinos. Se prevé que las consecuencias a corto plazo serás más que desalentadoras: desaparición de los pequeños puquiales y pantanos, daño permanente a la agricultura y ganadería y erosión del suelo.
Sin embargo, se sigue vendiendo al campesino la ilusión de algunos centavos a cambio de la venta de la madera que produce. Nunca se explica cuáles seran las desagradables consecuencias de una práctica por demás incoherente en una zona donde abundan los bosques naturales.
El colmo de la ignorancia (o talvez de la insanía de algunos funcionarios forestales) es que se están talando bosques naturales completos para ser reemplazados por plantaciones de eucaliptos. Y todo dirigido desde el PRONAMACHS, organismo estatal cuya función fundamental es el mantenimiento y conservación de cuencas hidrográficas.
Conocerán estos funcionarios el significado de mantenimiento y conservación? Nosotros sí, por eso sabemos que no tienen ni la menor idea de lo que hacen.
Desde las políticas de gobierno se alienta esta práctica sin tener en cuenta que si bien este tipo de plantaciones se desarrollan de manera formidable, lo cierto es que al mismo tiempo son especies que destruyen el medio debido a la gran cantidad de agua que consumen y a un proceso químico que deteriora el suelo y lo empobrece.
Se calcula que sólo en los dos últimos años se han plantado en la zona más de 100 000 eucaliptos y pinos. Se prevé que las consecuencias a corto plazo serás más que desalentadoras: desaparición de los pequeños puquiales y pantanos, daño permanente a la agricultura y ganadería y erosión del suelo.
Sin embargo, se sigue vendiendo al campesino la ilusión de algunos centavos a cambio de la venta de la madera que produce. Nunca se explica cuáles seran las desagradables consecuencias de una práctica por demás incoherente en una zona donde abundan los bosques naturales.
El colmo de la ignorancia (o talvez de la insanía de algunos funcionarios forestales) es que se están talando bosques naturales completos para ser reemplazados por plantaciones de eucaliptos. Y todo dirigido desde el PRONAMACHS, organismo estatal cuya función fundamental es el mantenimiento y conservación de cuencas hidrográficas.
Conocerán estos funcionarios el significado de mantenimiento y conservación? Nosotros sí, por eso sabemos que no tienen ni la menor idea de lo que hacen.